"Creo que lo tenemos"

"Creo que lo tenemos"
El laboratorio internacional CERN descubre una nueva partícula subatómica consistente en el bosón de Higgs, clave para dar masa a la materia

El hallazgo cierra una investigación de 40 años pero abre un nuevo campo inmenso para explorar.
De pie ante un auditorio que reunía lo mejor de la física mundial, Rolf Heuer, director de la Organización Europea de la Investigación Nuclear, sólo tuvo que decir "creo que lo tenemos".
No hacían falta más palabras para conseguir que los presentes en la sede del CERN, en Ginebra, se levantaran en una sonora ovación mientras un hombre de 83 años se secaba las lágrimas.
Era Peter Higgs, el científico que en la década de los sesenta teorizó por primera vez sobre la existencia de una partícula-que se llamaría el bosón de Higgs-encargada de dar masa a todo el resto de partículas elementales, sin la cual nada de lo que nos rodea se asemejaría a lo que conocemos y sin la cual, de hecho, no podría existir la vida.
Por la euforia desatada, por la higgstèria los días previos al anuncio y por alboroto generado se podría decir que, finalmente, el CERN había localizado la huidiza partícula.
"De hecho, si no fuera científico diría que lo hemos hecho", admitió Heuer en la presentación de los resultados del CMS y el ATLAS, los dos experimentos principales del acelerador LHC. Lo que sí admitió es el descubrimiento inequívoca de una nueva partícula que cuadra exactamente con lo que debería ser la partícula de Higgs,
aunque no se ha confirmado que sea justamente esta y, por tanto, existe la posibilidad de que sea ​​una hasta ahora desconocida, un hecho que abriría muchos más interrogantes.
El margen de error, sin embargo, es muy remoto, ya los dos experimentos (hasta ayer inmersos en una carrera para ser el primero en localizar la nueva partícula) otorgaron al descubrimiento 4,9 y 5 sigmas (el máximo), una cifra que, oficialmente, es suficiente para dar por confirmado un descubrimiento, ya que tiene una fiabilidad del 99,99994%.
Durante los últimos cuarenta años, los físicos han exprimido al máximo las posibilidades tecnológicas de instrumentos como los aceleradores de partículas para buscar señales de lo efímero bosón de Higgs y completar la gran construcción teórica que es el modelo estándar de la física.
"Al LHC se aceleran haces de protones a casi la velocidad de la luz y se hacen colisionar mil millones de veces por segundo con una energía que reproduce las condiciones de temperatura existentes tan sólo fracciones de segundo después del Big Bang", explica Aurelio Juste, que ha tomado parte en las investigaciones como miembro del Instituto de Física de Altas Energías de la UAB.
De ahí que las posibilidades que abre este descubrimiento sean cruciales, por ejemplo, para resolver las muchas incógnitas sobre la materia oscura (el ingrediente principal del universo) o incluso para "descubrir nuevas dimensiones, más allá de las tres que conocemos ", según el investigador egarense.
El físico y portavoz del experimento CMS, Joe Incandela, admitió que todavía hay "incertidumbres muy importantes", mientras que la responsable del ATLAS, Fabiola Gianotti, se comprometió a "continuar la investigación en todas las direcciones, sin excluir ninguna posibilidad ".
Durante la presentación de los datos de dos estudios, Peter Higgs se dirigió brevemente a los presentes para agradecer el trabajo realizado: "Quiero felicitar todo el mundo que está relacionado con este descubrimiento. Para mí es la cosa más increíble que me ha pasado en la vida.
"Fueron sus únicas declaraciones, porque después no quiso atender a los medios de comunicación presentes en el acto. Quizás, y sólo tal vez, fue una represalia por rebautizar su bosón como la partícula de Dios, un hecho que no gusta a los científicos en general y que él, como ateo confeso, rechaza frontalmente.
Justamente, la Conferencia Episcopal Española alabó ayer que "cuando el humano busca el origen de las cosas no puede evitar referirse a Dios".
En todo caso, los físicos seguirán en busca de más respuestas.
Y lo harán en seguida, porque el CERN ha decidido alargar tres meses el funcionamiento del LHC, que se había de parar pronto para hacer mantenimiento durante dos años.
Es el final de una era y el inicio de una serie de investigaciones que algún día proporcionarán conclusiones ahora inimaginables.

LA CIFRA
126 gigaelectrovolts (GeV) es la masa de la partícula detectada por los científicos en el acelerador LHC.

LA FRASE
Quiero felicitar a los investigadores. Para mí es la cosa más increíble que me ha pasado en la vida
Peter Higgs
FÍSICO